Al concluir el año 2023, en Cuba se realizaron unos 2 millones 817 mil consultas asociadas a las infecciones respiratorias agudas, lo que significa 146 mil 275 atenciones médicas menos por esa causa que al finalizar el 2022, con un comportamiento a la reducción en las últimas nueve semanas del año recién concluido. En tanto, la disminución de pacientes ingresados en las unidades de atención a casos graves fue de un 22.6 %. El control logrado en el país sobre la circulación del virus de la COVID-19 ha sido un elemento crucial para que así sea.
Los estudios de vigilancia epidemiológica y microbiológica que con sistematicidad se realizan en los laboratorios en Cuba, demuestran que en estos momentos sobresale la circulación de los virus sincitial respiratorio, influenza A, rinovirus y parainfluenza.
En el caso particular de la COVID-19, en los últimos dos meses del 2023 y los días transcurridos del 2024 se ha identificado principalmente la presencia de tres subvariantes de ómicron: XBB 1.5, XBB.1.9 y XBB.1.16, clasificadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como de interés o bajo vigilancia. (Más información)