pérdida auditiva

Los primeros medicamentos para tratar enfermedades de la audición podrían estar disponibles hacia el año 2020 según un nuevo informe lanzado por Action on Hearing Loss (RNID). Con cinco medicamentos ya en las etapas finales de pruebas clínicas y otros trece en estadios iniciales de desarrollo clínico, la Charity Action on Hearing Loss espera que las primeras nuevas medicinas sean aprobadas para el mercado hacia el año 2020. Ver más…

Los niños que no oyen bien, cuanto más utilicen audífonos, mejores serán sus capacidades para hablar y dominar el lenguaje, según demuestra un nuevo estudio.

«Los padres reciben información confusa, en especial si sus hijos padecen sólo una pérdida auditiva leve: ¿deberían utilizar audífonos o esperar hasta más adelante?», dijo la audióloga Mary Pat Moeller, del Centro para la Sordera Infantil del Hospital Nacional de Investigación de Boys Town, Omaha, Nebraska.

Pero hasta los niños que participaron del estudio con pérdida auditiva leve mejoraron significativamente las habilidades para hablar si utilizaban audífonos, según precisó Moeller. Y cuanto más tiempo los utilizaban, mayor era la mejoría.

Relevamientos de los CDC sugieren que entre menos del 1 %  hasta casi el 15 % de los niños estadounidenses padecen pérdida auditiva.

Los autores analizaron información de 180 niños de entre tres y cinco años que no podían oír bien. Casi todos utilizaban audífonos. Los evaluaron con pruebas del habla, el lenguaje y la articulación. Cuanto más mejoraba la audición con los dispositivos, mejor se desempeñaban los niños en esas pruebas. Y a mayor antigüedad de uso de los audífonos, mejores resultados, en especial en los que los dispositivos habían sido más efectivos.

La relación se mantuvo independientemente del grado de pérdida auditiva, según publica el equipo en JAMA Otolaryngology – Head & Neck Surgery (doi: 10.1001/jamaoto.2014.267).

«Eso podría atribuirse a que los audífonos reducen la pérdida auditiva moderada a grave y ligera a moderada», explicó el coautor, J. Bruce Tomblin, de University of Iowa, ciudad de Iowa City.

Comentó que la prueba del habla califica a los niños de manera similar que un test de coeficiente intelectual (CI) y el uso de los audífonos mejora el rango en el que se ubican esos niños.

Eso no quiere decir que los niños no puedan «ponerse al día» con el desarrollo del habla y el lenguaje si empiezan a utilizar los audífonos más adelante, según aclaró Tomblin.

Algunos investigadores aseguran que la niñez temprana es un «período crítico» para la exposición de los niños al lenguaje, pero Tomblin no adhiere necesariamente a esa teoría.

Los niños con pérdida auditiva leve pueden beneficiarse con el uso de audífonos más allá del habla y el lenguaje; su calidad de vida y su rendimiento general también mejoran, según dijo la doctora Judith E. Cho Lieu, otorrinolaringóloga pediátrica de la Facultad de Medicina de Washington University, St. Louis, Missouri, y que no participó del estudio.

Aun así, «el uso de audífonos solamente no es suficiente para la adquisición del habla y el lenguaje», indicó Lieu por e-mail.

Tomblin aclaró que los resultados no se aplican a los niños sordos, que no fueron el objeto de estudio. Esa población aprenden el Lenguaje de Señas Estadounidense o recibe un implante coclear.

Moller explicó que los audífonos para niños cuestan unos 8500 dólares, pero el costo varía según la marca. Para Tomblin, el beneficio que recibe el niño supera el costo. abril 11/2014 (Medcenter.com)

Tomblin JB, Oleson JJ, Ambrose SE, Walker E, Moeller MP.The Influence of Hearing Aids on the Speech and Language Development of Children With Hearing Loss.JAMA Otolaryngol Head Neck Surg. 2014 Abr 3.

La pérdida auditiva afecta a 36 millón estadounidenses, dejándolos a menudo con un sentimiento de aislamiento, pero hasta el momento ha recibido poca atención de la industria farmacéutica. Las firmas pequeñas han traído un puñado de terapias potenciales de conducir a su desarrollo, y los pesos pesados farmacéuticos se están dando cuenta, de acuerdo con un artículo en Chemical & Engineering News (C&EN), la revista semanal de la Sociedad Química Estadounidense.

Se afirma que la causa más común de pérdida auditiva es el ruido, derivado de un evento aislado como la explosión de un petardo o la exposición crónica, es decir la escucha diaria de un iPod. Aunque la pérdida auditiva grave puede ser tratada con audífonos o implantes cocleares, las opciones son escasas para aquellos que sufren de daño moderado. Pero existe un interés cada vez mayor en llenar el vacío y desarrollar tratamientos preventivos. Diversos candidatos medicamentosos ya han avanzado en ensayos clínicos en pacientes.

Lisa M. Jarvis, editor principal de C& EN, destaca que los potenciales tratamientos generalmente se concentran en dos áreas: el oído interno, donde el sonido es percibido primero, y el sistema nervioso central (incluyendo el cerebro), donde el sonido es procesado. Los investigadores están usando moléculas pequeñas y enfoques de terapia de genes para centrarse en componentes diferentes, desde la reproducción de las células ciliadas del oído, hasta controlar cómo trabajan las células nerviosas involucradas en la audición. Compañías pequeñas que se destacan en este campo como Audion Therapeutics han mostrado éxitos suficientes, introduciendo en un bolsillo a firmas como Eli Lilly & Co., Novartis y Roche que aumentan su respaldo. 12 de abril de 2014.

MedicalNewsToday

La audición en jerbos, roedores del tamaño de una rata, se vio parcialmente mejorada luego de que se reconstruyeran los nervios en el oído, encargados de transmitir los sonidos al cerebro, de acuerdo a un estudio publicado en la revista Nature.

Obtener la misma mejoría en humanos implicaría que alguien incapaz de escuchar el ruido del tráfico puede escuchar una conversación. Sin embargo, el tratamiento en humanos todavía es una posibilidad lejana.

Si uno quiere escuchar la radio o charlar con un amigo, el oído debe convertir las ondas de sonido en el aire en señales eléctricas.

Esto ocurre dentro del oído interno donde las vibraciones mueven pequeños cabellos y es eso lo que crea la señal eléctrica.

Sin embargo, en alrededor de una de cada diez personas con una pérdida auditiva profunda, las células nerviosas que deberían recoger la señal están dañadas. Es como si se cayera el testigo en una carrera de relevo en la primera etapa de la competencia.

El objetivo de los investigadores de la Universidad de Sheffield, en Inglaterra, era reemplazar estas células, conocidas como neuronas del ganglio espiral, con otras nuevas.

Usaron células madre de un embrión humano, que son capaces de transformarse en cualquier otro tipo de célula en el cuerpo humano.

A las células madre se les agregó una sopa química que las convirtió en células similares a las neuronas del ganglio espiral. Luego fueron delicadamente inyectadas en los oídos internos de 18 jerbos sordos.

A lo largo de diez semanas su audición mejoró. En promedio, al final del estudio, 45% de su capacidad auditiva fue restablecida.

«Significaría pasar de ser tan sordo como para no escuchar un camión en la calle, al punto de ser capaz de escuchar una conversación», explica el doctor Marcelo Rivolta, responsable del estudio.

«No es una cura completa, no serán capaces de escuchar un suspiro, pero sin duda serían capaces de mantener una conversación en una habitación», agrega.

Alrededor de un tercio de los jerbos respondieron de muy buena forma al tratamiento. Algunos de ellos recuperaron hasta el 90% de su capacidad auditiva, mientras que poco menos de un tercio apenas respondieron al experimento.

Los jerbos fueron utilizados porque son capaces de oír el mismo rango de sonidos que la gente, a diferencia de los ratones que escuchan tonos de alta frecuencia.

Los investigadores detectaron la mejora en la audición mediante la medición de las ondas cerebrales.

A los jerbos se los estudió durante diez semanas. Si esto se convirtiera en un estudio para humanos, entonces el efecto tendría que darse en un período de tiempo mucho más largo.

También existen cuestionamientos en torno a la seguridad y a la ética de los tratamientos con células madre.

«Es un gran momento, realmente es un gran avance», le dijo a la BBC el profesor Dave Moore, director del Instituto de Investigación Auditiva del Consejo de Investigación Médica de Nottingham, Inglaterra.

Sin embargo, advirtió que todavía habrá dificultades para repetirlo en humanos.

«El mayor problema en realidad es llegar a la parte del oído interno donde se va a hacer algún bien. Es muy pequeña y muy difícil de llegar y que será una empresa realmente formidable», dijo.

El doctor Ralph Holme, director de investigación biomédica en la ONG Action on Hearing Loss, aseguró: «Esta investigación es tremendamente alentadora y nos da una esperanza real de que es posible reparar en el futuro la causa de algunos tipos de pérdida auditiva». 15 de septiembre de 2012

DiarioSalud.Net

Su madre tenía razón cuando lo advirtió que la música fuerte podía dañar su oído, pero ahora los científicos han descubierto exactamente qué produce el daño y cómo. En un informe de investigación publicado en el número de septiembre de 2013 de la revista FASEB, los científicos describen exactamente el tipo de ruido nocivo para el oído interno, ofreciendo una idea  sobre un compuesto que puede prevenir el daño relacionado con el ruido. Ver más…

La otosclerosis, que es una enfermedad caracterizada por la pérdida progresiva de la audición, puede ser generada durante el embarazo porque los cambios hormonales son detonantes de la afección, afirmó el experto Arnulfo Cornejo Suárez.

El otorrinolaringólogo del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco, mencionó que caracterizada por la pérdida paulatina de la audición, la otosclerosis es una enfermedad cuyo origen no está precisado, aunque una de las hipótesis es la herencia.

El médico dijo que se trata de una enfermedad autosómica dominante, lo cual significa que si uno de los progenitores la padece, las probabilidades de que alguno de sus hijos la presente es de entre el 30 y el 40 %.

Indicó que la pérdida auditiva es tan insidiosa que el afectado apenas si se da cuenta y es a través de allegados, ya sea en su familia o en su centro laboral, quienes le hacen ver su problema: «por qué no me contestas, qué no me oyes».

Precisó que si bien la pérdida auditiva es el síntoma pivote, existen otros datos clínicos que sugieren la presencia de otosclerosis, entre los que se incluyen los zumbidos de diferente intensidad, así como los mareos (vértigo) que en no pocas ocasiones pueden producir pérdida de equilibrio y riesgo elevado a sufrir caídas.

Por su parte, Leticia, quien en diciembre del año pasado fue intervenida quirúrgicamente para corregir la otosclerosis que padecía dijo: «Yo estaba en la cuarentena porque acababa de nacer mi tercer bebé y lo estaba amamantando cuando sentí un mareo muy fuerte, me fui de lado, me sentí muy mal».

El especialista comentó que como el caso de Leticia, existen muchos más debido a que el embarazo por los cambios hormonales que trae consigo, constituye uno de los más importantes disparadores de la otosclerosis.

«Tan es así que esta enfermedad suele presentarse con más frecuencia en mujeres, en proporción de dos a uno en comparación con los hombres», señaló el médico.

Leticia recordó también que antes de que le diagnosticaran la otosclerosis, mediante una audiometría, «no tenía ni idea de que existiera», aunque tenía síntomas de estar perdiendo la audición.

Comentó que una vez con el diagnóstico, se le informó que por los resultados obtenidos en su audiometría, era candidata a cirugía para corrección de su otosclerosis.

El experto destacó que en el Hospital de Especialidades la operación para corrección de otosclerosis constituye el segundo motivo quirúrgico en frecuencia (el primero es para corrección de secuelas de otitis media crónica), y dijo que con el tiempo en el nosocomio se ha simplificado el procedimiento con la inclusión de la endoscopía.

Detalló, en un comunicado, que por lo general la cirugía para otosclerosis se hace con el uso de microscopio, sin embargo, desde 2005 en el Hospital de Especialidades se añadió como herramienta el uso de la endoscopía.

Luego de siete meses de haber sido operada, Leticia aseguró que se siente contenta y muy satisfecha con los resultados porque ahora puede oír.
julio 7/2013 (Notimex)

Tomado del Boletín de Prensa Latina: Copyright 2012 “Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.”

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