Hallan una fuente de células madre en el hígado

Científicos del Instituto Médico de Howard Hughes en Estados Unidos, han identificado células madres en el hígado, que darían lugar a las células funcionales hepáticas. «Hemos demostrado que, al igual que otros tejidos necesitan reemplazar las células perdidas, el hígado también tiene células madre que proliferan y dan lugar a células maduras, incluso cuando no ha habido cirugía o enfermedad«, explica Roel Nusse, de la Universidad de Stanford y director de la investigación, publicada en Nature.

«El hígado está compuesto en su mayoría de hepatocitos, células altamente especializadas que se encargan de diferentes funciones del órgano, como el almacenamiento de vitaminas y minerales, remover toxinas, y ayudar a regular los azúcares en el corriente sanguíneo. Cuando estas células mueren, se reemplazan por nuevos hepatocitos sanos. La fuente de esas células, sin embargo, nunca se había identificado«, explica Nusse.

La células madre proveen de células nuevas a la piel, sangre y otros tejidos donde éstas se pierden de forma natural con el tiempo. Sin embargo, nunca se habían encontrado células madre en el hígado. Algunos científicos especulaban sobre hepatocitos maduros que podrían mantener su población al duplicarse. Pero Nusse explica que esas células maduras están tan especializadas en mantener el funcionamiento del hígado, que han perdido la habilidad de dividirse.

Experimento en ratones
El laboratorio de Nusse, en Stanford, se centró en una familia de proteínas llamadas Wnts. Para encontrar y seguir a estas células en una variedad de tejidos, desarrollaron ratones en los que las células que respondían a las señales de la Wnts eran clasificadas con una proteína fluorescente. Bruce Wang, gastroenterólogo en el Liver Center de la Universidad de California en San Francisco (Estados Unidos), dirigió un experimento como profesor visitante en el laboratorio de Nusse. Wang empezó a buscar estas células que respondían a las proteínas Wnts en los ratones modificados, y descubrió que se agrupaban alrededor de la vena central del hígado.

Una vez que ya sabían en que células enfocarse, los científicos rastrearon el comportamiento de las fluorescentes. Con el tiempo, advirtieron que éstas dividían rápida y sostenidamente su propia población. Además, al seguir a los descendientes de las células madres durante un año, los científicos descubrieron que estas habían cambiado, asumiendo las características especializadas y los genomas amplificados de los hepatocitos maduros.

Como se esperaba, las células madre del hígado requieren señales de la Wnt para mantener su identidad. El equipo de Nusse encontró que las células endoteliales que revisten a la vena central, liberaban moléculas Wnt en el tejido. Así, las células madre, perdían su habilidad para dividirse en nuevas y empezaban a desarrollarse en hepatocitos maduros.

Ahora, el laboratorio investiga cómo estas células madre podrían ayudar a construir el tejido hepático dañado.

Fuente: Diario Médico.