Algunos casos de COVID-19 se han presentado con lesión renal y los hallazgos de autopsia en pacientes fallecidos por la infección, también han revelado afectación renal. Numerosas investigaciones han encontrado que los resultados adversos a corto plazo de la afección renal se asocian con la gravedad de la COVID-19.
Se ha observado también que aunque las anomalías renales tempranas a menudo se resuelven, se recomienda el apoyo intensivo y la monitorización cuidadosa de la enfermedad grave o crítica por COVID-19 en pacientes con complicaciones renales.
La conferencia COVID-9 y riñón: riesgo, daño y secuelas abordó este tema durante las «Jornadas de actualización 2020». Usted la puede descargar desde aquí:
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