La Asamblea General de las Naciones Unidas (NU), en su cuadragésimo noveno período de sesiones del 30 de enero de 1995, aprobó la resolución 49/115 referida a la observancia del Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía, el 17 de junio de cada año.
La desertificación y la sequía son problemas de dimensión mundial, que afectan a todas las regiones del mundo, con graves consecuencias para la seguridad de los ecosistemas, la erradicación de la pobreza, la estabilidad socioeconómica y el desarrollo sostenible a nivel mundial. Por ello es preciso que la comunidad internacional tome medidas concertadas para luchar contra estas contingencias, en particular en África. (Más información)