melanoma

Retirar los ganglios en las cercanías del tumor en pacientes afectados por un melanoma, un cáncer agresivo de piel, no prolonga su vida, señala un estudio clínico publicado el miércoles en la New England Journal of Medicine. Actualmente, desde que se realiza un diagnóstico de melanoma, los ganglios alrededor del tumor son por lo general extirpados y se les efectúa una biopsia para saber si el cáncer ha comenzado a extenderse.

El estudio difundido este miércoles, llevado a cabo sobre más de 1900 pacientes afectados por un melanoma, es el más vasto realizado hasta el momento sobre este procedimiento y su impacto sobre las posibilidades de supervivencia, comparado con los pacientes que no fueron sometidos a esta intervención. Ampliar…

El grupo de Manel Esteller, en el Idibell, describe un marcador de respuesta a los inhibidores de BRAF.

La hipometilación que reactiva la transcripción críptica de Rab GTPasa y activa la proteína TBC1D16 está implicada en la cascada de mecanismos que desencadenan el proceso de metástasis en el melanoma, según un artículo dirigido por Manel Esteller, director del Programa de Epigenética y Biología del Cáncer en el Instituto de Investigaciones Biomédicas de Bellvitge (Idibell), investigador Icrea y profesor de Genética de la Universidad de Barcelona (UB).

El trabajo, que publica la revista «Nature Medicine», concluye además que las células que presentan esta alteración son susceptibles de responder mejor a los nuevos tratamientos moleculares dirigidos contra marcadores específicos, por lo que se postula como un útil biomarcador de respuesta terapéutica.

Esteller ha recordado que la aparición de metástasis es la responsable del 90 % de las muertes en pacientes con cáncer. «Por ello, intentar entender los mecanismos implicados en este proceso es uno de los objetivos principales en nuestro campo de investigación». Además, ha recordado que uno de los tumores con mayor capacidad de producir metástasis es el melanoma, «cuya incidencia está aumentando en las últimas décadas debido a la mayor exposición solar».

Un solo gen

Este grupo de trabajo, en su ardua búsqueda de cambios epigenéticos causantes de metástasis, pudo detectar que «solo un gen se alteraba de forma epigenética en las metástasis de melanoma, mama y colon: el TBC1D16″.

En este trabajo se han analizado y comparado muestras de tumores primarios con las de metástasis de pacientes y se ha podido comprobar que la activación de dicho gen está presente en las células metastásicas, mientras que en las originales, así como en las células sanas, está silenciado.

«Hemos observado que el TBC1D16 se enciende como una bombilla para guiar a las metástasis que se escapan de su sitio de nacimiento». Además, ha detallado que este gen se encuentra en un «cruce de caminos» de las vías de señalización celular y es el responsable de modular a potentes oncogenes como el BRAF y el EGFR. «Y lo que es sumamente interesante es que estas metástasis del melanoma se vuelven adictas a estos genes y entonces la terapia con fármacos que los tienen como diana, llamados inhibidores de BRAF y de MEK, es más efectiva».

A partir de estos hallazgos, los próximos objetivos de investigación en esta línea serán, además de buscar otros genes con alteraciones epigenéticas, extender el estudio a otros tipos tumorales, «para ver cuán general es el mecanismo descubierto».
Además, otra de las metas de Esteller y sus colaboradores es ahondar en la búsqueda de inhibidores específicos de TBC1D16 como potenciales fármacos antimetastásicos.
junio 10/2015 (Diario Médico)

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Evaluar un ganglio linfático clave en los pacientes con la forma más peligrosa del cáncer de piel es el mejor método para determinar si el cáncer se ha propagado, indica un nuevo ensayo clínico en etapa avanzada.

La prueba podría mejorar significativamente la supervivencia de aquellos cuyos ganglios linfáticos afectados se extirpen entonces, apuntaron los investigadores.

El estudio, que culmina casi dos décadas de investigación internacional, provee la primera evidencia a largo plazo que afirma el valor de un procedimiento conocido como «biopsia del ganglio centinela» para las lesiones de melanoma intermedias y gruesas, señalaron los autores del estudio.

El estudio comparó a los pacientes de melanoma durante un periodo de 10 años. Entre las personas con lesiones de grosor intermedio, aquellos cuyos ganglios linfáticos se extirparon después de que la biopsia del ganglio centinela resultara positiva para el cáncer tenían un 44 % más de probabilidades de sobrevivir a su melanoma, aseguró el autor del estudio, el Dr. Mark Faries. Al otro grupo de pacientes de «espera vigilante» no se les extirparon los nódulos hasta que luego se halló que la enfermedad se había propagado.

«Tiene sentido: en los que no fueron tratados por adelantado el melanoma se propagó del ganglio centinela a otros ganglios en el área, [lo que puede favorecer] una propagación por todo el cuerpo», señaló Faries.»Este estudio provee evidencia concreta de que todo lo que habíamos supuesto sobre el procedimiento del ganglio centinela… y el tratamiento de los ganglios linfáticos es verdad».

Según la Asociación Estadounidense del Cáncer (American Cancer Society), los ganglios linfáticos son unas pequeñas estructuras que funcionan como filtros de las sustancias nocivas en el cuerpo. Contienen células inmunitarias que pueden ayudar a combatir la infección al atacar y destruir los gérmenes en la linfa.

El estudio de Faries, director de investigación sobre melanoma del Instituto Oncológico John Wayne en Santa Mónica, California, y sus colaboradores aparece en la revista New England Journal of Medicine (doi: 10.1056/NEJMoa1310460.).

Cada año, unos 120 000 estadounidenses son diagnosticados con melanoma, y la enfermedad mata a unos 9000, según la Skin Cancer Foundation. El factor de riesgo más potente de la enfermedad es una exposición intensa y periódica a la luz ultravioleta de la luz solar o de las camas de bronceado, y otros factores de riesgo incluyen la piel clara y los antecedentes familiares.

El estudio, que comenzó en 1994, asignó al azar a unos 2000 pacientes de melanoma a dos grupos. En el grupo de observación se extrajeron las lesiones y se observaron los ganglios linfáticos a la espera de la recurrencia, momento en el cual se extirparon. El grupo de la biopsia se sometió a la extirpación de la lesión y a una biopsia del ganglio centinela, con una extirpación inmediata de los ganglios linfáticos en los pacientes cuyo cáncer se había propagado al ganglio centinela.

En el melanoma, una biopsia del ganglio centinela extirpa el ganglio más cercano a una lesión y lo evalúa para buscar evidencias de cáncer. Si el ganglio centinela no está afectado, es muy poco probable que el cáncer se haya propagado a los ganglios linfáticos circundantes ni a lugares lejanos en el organismo. El procedimiento de biopsia también se utiliza para otras malignidades, sobre todo en el cáncer de mama.

En el grupo de biopsia del nuevo estudio, los resultados del ganglio centinela fueron el predictor más importante de supervivencia a 10 años entre los pacientes de melanoma cuyas lesiones se consideraban como intermedias o gruesas.

Las tasas de supervivencia libre de enfermedad de más de diez años fueron significativamente mejores en el grupo de biopsia en los pacientes con un melanoma intermedio (alrededor del 71 %  frente al 65 %) y un melanoma grueso (casi el 51 % frente al 41 %).

Entre los pacientes cuyo cáncer se propagó a los ganglios linfáticos desde un melanoma de grosor intermedio, la biopsia arrojó una mejor supervivencia libre de enfermedad a los 10 años respecto a los órganos lejanos, además de una mejor supervivencia general al melanoma.

Extraer todos los ganglios linfáticos de un área del cuerpo puede provocar una dolorosa inflamación crónica del tejido conocida como linfedema. Pero este riesgo para los pacientes de melanoma puede ser respaldado por las mejoras en la tasa de supervivencia documentadas en el nuevo estudio, señaló el Dr. Charles Balch, profesor de cirugía de la división de oncología quirúrgica del Centro Médico Southwestern de la Universidad de Texas, en Dallas.

Balch, coautor de un editorial que acompaña al estudio en la revista, dijo que la investigación «cambia la práctica» debido a la duración del ensayo clínico y la potencia de los hallazgos.

«Si sabemos que hay un aumento en la inflamación de la pierna o el brazo, podemos justificar mejor (la extirpación de los ganglios) al paciente si aumenta la supervivencia», señaló Balch. «Este es el estudio más grande que se ha hecho nunca sobre este tema, es multinacional y con el seguimiento más prolongado. Realmente es un trabajo seminal».
febrero 13/2014 (Medlineplus)

Morton DL, Thompson JF, Cochran AJ, Mozzillo N, Nieweg OE, Roses DF.Final trial report of sentinel-node biopsy versus nodal observation in melanoma.N Engl J Med. 2014 Feb 13;370(7):599-609.

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Un gen vinculado a la obesidad y al sobrepeso incrementa el riesgo de contraer melanomas, concluyó una investigación de científicos británicos.

Expertos de la Universidad de Leeds (norte de Inglaterra) indicaron que personas con una cierta modificación de ADN en el gen FTO tienen más posibilidades de desarrollar melanomas malignos.

Investigaciones previas habían mostrado que variaciones en diferentes partes de ese gen eran un factor de alto riesgo para la obesidad.

Pero ahora se logró detectar el vínculo entre la obesidad y el melanoma.

El estudio, publicado en la revista especializada Nature Genetics  (doi:10.1038/ng.2571), destacó que el gen FTO posee muchas más funciones que las estimadas inicialmente.

El científico Mark Illes, jefe del grupo de investigadores de la Universidad de Leeds, admitió que se trata de la primera vez que el gen de la obesidad, ya vinculado a múltiples enfermedades, «es asociado ahora con el melanoma».

«Esto nos hace pensar que futuras investigaciones revelarán que el gen podría tener incluso más incidencia en otras enfermedades», explicó el experto.

«Cuando los científicos han tratado de entender cómo se comportaba el gen FTO, hasta ahora sólo habían examinado su rol en el metabolismo y el apetito. Pero ahora está claro que no sabemos lo suficiente acerca de lo que puede hacer este misterioso gen», agregó.

Según Illes, el estudio de su equipo «revela un nuevo tipo de investigaciones tanto en enfermedades relacionadas con la obesidad, como con el cáncer de piel».

Los científicos analizaron el ADN de más de 13 000 pacientes con melanoma y cerca de 60 000 personas sin la enfermedad alrededor del mundo.

Y descubrieron que una variante de ADN en el gen FTO incrementaba el riesgo de contraer melanoma, en un 16%.

Los melanomas malignos son el quinto tipo de cáncer más común en Gran Bretaña, donde se registran 12 800 nuevos casos cada año, provocando la muerte de al menos 220 personas.

La médica Julie Sharp, experta científica del grupo Cáncer Research UK, que financió el estudio de Leeds, sostuvo que las conclusiones de la investigación «son fascinantes».

«Y si se confirman a partir de más estudios, podríamos potencialmente proveer de nuevos objetivos para crear drogas que traten el melanoma», sostuvo.

«Los avances para entender más acerca de las moléculas que generan el cáncer nos han permito ya desarrollar nuevas e importantes drogas contra el cáncer que harán una diferencia real en los pacientes», agregó.

Sharp reiteró la importancia de evitar demasiada exposición a los rayos solares, como también a las camas solares.

«Quemarse por exposición al sol sólo una vez cada dos años puede triplicar el riesgo de contraer melanomas malignos», indicó Sharp.
marzo 3/2013 (ANSA) –

Tomado del boletín de selección temática de Prensa Latina: Copyright 2011 «Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.»

Mark M Iles, Matthew H Law, Simon N Stacey, Jiali Han, Shenying Fang, Ruth Pfeiffer.A variant in FTO shows association with melanoma risk not due to BMI.Nature Genetics. 03 Mar 2013

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Un estudio que se publica en Nature (doi: 10.1038/nature11538) ha mostrado, en un modelo de ratón con melanoma, que los tumores desarrollan resistencia a la terapia celular mediante procesos de la vía inflamatoria.
Los hallazgos obtenidos por el grupo coordinado por Thomas Tüting, de la Universidad de Bonn, en Alemania, podrían ayudar a guiar el desarrollo de protocolos terapéuticos eficaces.
Los científicos han hallado que la resistencia es adquirida a través de la pérdida de antígenos melanocíticos, proteínas que usan células T citotóxicas para reconocer tumores.
El trabajo indica que la plasticidad de las células tumorales más que la proliferación selectiva de las poblaciones celulares -como previamente se había hipotetizado- es responsable de la resistencia a la terapia celular.
octubre 11/2012 (Diario Médico)
Jennifer Landsberg, Judith Kohlmeyer, Marcel Renn, Tobias Bald, Meri Rogava, Thomas Tüting. Melanomas resist T-cell therapy through inflammation-induced reversible dedifferentiation. Nature, 10 Oct 2012

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Un estudio que se publica en Science Translational Medicine  revela más pistas de cómo las células del cáncer escapan al sistema inmune.
Lieping Chen, de la Universidad de Yale, en New Haven, explica cómo las células del melanoma liberan la molécula B7-H1 para suprimir las células inmunes, lo que sugiere que algunos pacientes con melanoma se podrían beneficiar de fármacos que bloqueen su expresión.
El equipo ha visto en muestras de 150 pacientes con melanoma que la B7-H1 puede ser responsable de la supresión del sistema inmunitario en cerca del 40 % de los pacientes, por lo que se puede convertir en una estrategia de inmunoterapia. Marzo 29/2012 (Diario Médico)

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Para pacientes con melanoma avanzado una vacuna combinada con un fármaco de estimulación inmunológica parece ser prometedora en un ensayo clínico grande.
Las vacunas terapéuticas de cáncer, a diferencia de las que previenen las infecciones típicas, tienen el propósito de poner en marcha el sistema inmunológico para ayudar en la batalla contra tumores existentes.
En este ensayo clínico de fase 3, realizado en 21 centros de atención, los investigadores asignaron aleatoriamente a 185 pacientes con melanoma metastásico, ya sea a la vacuna seguida por interleucina-2, un fármaco que active el sistema inmunológico, o interleucina-2 sola.
Los que recibieron la combinación de la vacuna y el medicamento mostraron una mayor mejoría que los que recibieron el fármaco por separado, según el estudio, que fue publicado en la edición del 2 de junio de la New England Journal of Medicine.
Alrededor del 16% de los que recibieron la combinación de vacuna/interleucina-2 vieron que sus tumores se redujeron en 50% o más, en comparación con el 6% al dar la interleucina-2 sola.
Los del grupo de la vacuna/medicamento también mostraron una supervivencia «libre de progresión» ligeramente mayor 2.2 meses en comparación con 1.6 mes lo cual significa que hubo más tiempo en que el tumor no creció.
Los pacientes que recibieron la combinación también vivieron en promedio 7 meses más que aquellos que solo recibieron interleucina-2 cerca de 18 meses en comparación con alrededor de 11 meses. A pesar de una «fuerte tendencia», los resultados no fueron estadísticamente significativos, dijo el autor principal del estudio, el Dr. Douglas Schwartzentruber, director médico del Centro Goshen para el Cuidado del Cáncer en la Universidad de Indiana.
«Esta es la primera vez que la vacuna ha demostrado ser útil en el tratamiento de pacientes con melanoma metastásico, y es un temprano ejemplo de éxito con una vacuna contra el cáncer», dijo Schwartzentruber.
Los investigadores informaron que, aunque los efectos tóxicos relacionados con el tratamiento fueron similares en ambos grupos, la vacuna «añadió ciertos efectos tóxicos» en la terapia combinada, incluyendo problemas cardíacos transitorios, como arritmias (15% contra 2%).
Además, los investigadores informaron una muerte relacionada con el tratamiento en el grupo de interleucina-2 y solo dos muertes en el grupo de terapia combinada.
Las vacunas terapéuticas se están estudiando para varios tipos de cáncer, con diversos grados de éxito, dijo William Chambers, director de investigación clínica del cáncer e inmunología de la Sociedad Americana del Cáncer.
«En el estudio del melanoma es evidente que hubo un número bastante significativo que tuvo una respuesta», dijo Chambers. «Y con esta enfermedad, no ha habido mucho éxito en el tratamiento de estos pacientes. Su pronóstico ha sido pobre. Ellos aprendieron algunas lecciones importantes en este estudio»
Para que esta vacuna funcione, los pacientes tenían que tener un tipo de tejido en particular, llamado HLA-A2, que está presenten en aproximadamente la mitad de los blancos.
El año pasado, la Administración de Alimentos y Fármacos (FDA) de los Estados Unidos aprobó una vacuna para tratar el cáncer de próstata. Los investigadores de la Universidad de California en Los Ángeles también están trabajando en una vacuna para tratar el glioblastoma, el tipo más agresivo de tumor cerebral maligno.
La vacuna contra el melanoma se basa en un péptido, o una pequeña porción de una proteína, que está presente en la superficie de las células del melanoma del cáncer. Conocida como la vacuna de péptido gp100, la inyección prepara al sistema inmunológico a reconocer la proteína, por lo que a continuación, busca las células que producen la proteína y las destruye.
La interleucina-2, una droga impulsora del sistema inmunológico, mejora la eficacia de la vacuna, estimulando la producción de linfocitos, un tipo de glóbulos blancos de la sangre que circulan por todo el cuerpo. Más linfocitos circulantes significan más células disponibles para hacer el trabajo que la vacuna las ha «educado» para hacer, dijo Schwartzentruber.
La tasa de supervivencia de cinco años para los pacientes con melanoma es de menos del 10%, según los expertos. La interleucina-2 ya está aprobada por la FDA para tratar el melanoma metastásico y el cáncer de riñón.
Los investigadores dijeron que su próximo paso es mejorar la eficacia de la vacuna. Esperan que mediante la combinación de la vacuna con otros agentes (llamados adyuvantes) o los medicamentos de estimulación inmunológica, podrían obtener una respuesta más fuerte.
«Ahora tenemos una prueba contundente de que un tratamiento inmunológico puede ser beneficioso, pero en este momento, los beneficios son pequeños», dijo Schwartzentruber. «Lo que hemos decidido hacer es tratar de desarrollar una vacuna más potente antes de hacer otro estudio.»
La vacuna, en caso de ser aprobada por la FDA, sería relativamente barata, ya que está basada en una proteína presente en la mayor parte de cánceres de melanoma, mientras que otras vacunas han tenido que ser creadas para cada paciente individual, dijeron los investigadores.
La vacuna fue desarrollada en el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos, que también financió el estudio.
Junio 7/2011 (Intramed).

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