02/07/2025
El neurodesarrollo, al igual que toda la ontogenia, se origina a partir de una base genética predeterminada y también es influenciado por factores ambientales. Entre estos dos elementos actúan los mecanismos epigenéticos, que sirven como puente de interacción. El propósito de este estudio es organizar los fundamentos teóricos sobre el papel crucial de la epigenética en el desarrollo cerebral normal y anormal, con el fin de apoyar la promoción de la salud neurológica y la prevención de trastornos relacionados.
La epigenética comprende un conjunto de modificaciones químicas que regulan la actividad del ADN sin cambiar su secuencia original; estas alteraciones están influenciadas por el entorno y pueden ser estables, hereditarias y, en ciertos casos, reversibles. La reprogramación epigenética tiene lugar principalmente durante los primeros mil días posteriores a la fecundación, influyendo en procesos normales y anormales del desarrollo, especialmente en el sistema nervioso. Algunos ejemplos destacados son la anencefalia y el trastorno del espectro autista. Además, se reconoce que aspectos del ambiente, como la alimentación, la edad de los progenitores, hábitos perjudiciales y el estrés, tienen efectos epigenéticos significativos. Por esta razón, dichos factores deben considerarse esenciales al diseñar estrategias prioritarias para promover, prevenir y cuidar el neurodesarrollo durante el crecimiento humano.
Puedes ampliar la información en el artículo «Epigenética del neurodesarrollo humano, por la promoción de su salud y prevención de enfermedad» de los autores Blanco-Pereira ME, Hernández-Suárez D, Martínez-Leyva G, Pérez-Moreno MC, Ricardo-Falcón MF, Pérez-García K. el cual puedes consultar en la Revista Médica Electrónica de la Universidad de Ciencias Médicas de Matanzas, Cuba.
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