Dres. R. A. Benson, R. Palin, P. J. E. Holt, I. M. Loftus BMJ 2013;347:f6800
La hiperhidrosis primaria se caracteriza por una sudoración excesiva que supera a la que se necesita para la termorregulación normal. A menudo, esta enfermedad no se denuncia por vergüenza, mientras que su tratamiento se ve obstaculizado por la escasez de evidencia y la falta de guías clínicas. La ansiedad dada por las situaciones y relaciones sociales y los problemas de la vida diaria, por ejemplo, la incapacidad para mantener en la mano una lapicera en el trabajo pueden afectar la calidad de vida. La hiperhidrosis puede asociarse a la bromhidrosis (olor desagradable), provocada por los subproductos de las bacterias que colonizan las zonas sudorosas. Las percepciones subjetivas que impactan en las condiciones de vida del individuo, es decir, su gravedad, pueden confirmar el diagnóstico y hacer difícil su tratamiento .