2013 Archives

Dres. T. Gambichler, C. Tigges, N. Scola, J. Weber, M. Skrygan, F.G. Bechara, P. Altmeyer y A. Kreuter
BJD 2011 British Association of Dermatologists 2011 164, pag1383–1386

La psoriasis es una de las dermatosis crónicas y recurrentes más comunes, que afecta casi el 2% de la población general.  El rol central del factor de necrosis tumoral alfa en psoriasis se ha dilucidado por las observaciones de la eficacia de las terapias biológicas anti-factor de necrosis tumoral alfa.  El etanercept es un inhibidor competitivo del factor de necrosis tumoral alfa que previene la interacción entre la citoquina y los receptores se superficie celular.  Actualmente existen escasos datos sobre terapias combinadas en psoriasis utilizando agentes anti TNF alfa más fototerapia.  En éste estudio, los autores evaluaron si el etanercept más UVB de banda angosta es superior a la monoterapia con etanercept durante 6 semanas en pacientes con psoriasis.

Este fue un estudio prospectivo, ciego para el investigador.  Se incluyeron 14 pacientes (ocho hombres y seis mujeres) con psoriasis moderada a severa.  Los criterios de inclusión era un PASI mayor de 10.  Durante el estudio los pacientes podían usar emolientes tópicos solos o en asociación a UVB de banda angosta y / o terapia con etanercept.

Ver

Birgitte Stausbø -Grøn, Anne B. Olesen, Bent Deleuran Y Mette S. Deleuran
Acta Derm Venereol 2011; 91: 686–688

En la esclerodermia, la piel se hace esclerótica luego de una reacción inflamatoria inicial.  La dermis se engrosa y endurece.  La forma localizada, morfea, puede causar secuelas físicas o psicológicas, en particular la morfea panesclerótica y la morfea profunda.  Estas variantes pueden manifestar esclerosis en el tejido conectivo septos de la grasa subcutánea y de la fascia muscular.  La piel se inmoviliza y desarrolla una superficie deprimida.  En casos severos se pueden desarrollar contracturas musculares.

Ver

Dres. Yuichi Kurihara, Hiroyoshi Inoue, Hiromaro Kiryu, Masutaka Furue
Indian J Dermatol 2012;57:401-3.

El hemangioma epiteloide (EH) se describió en 1969 como hiperplasia angiolinfoide con eosinofilia (ALHE).

Las lesiones generalmente se presentan como pápulas únicas o múltiples rojo-amarronadas o nódulos subcutáneos con predilección por cabeza y cuello.  El compromiso de tronco es extremadamente raro con sólo 9 casos de EH (ALHE) reportados en la literatura a partir del 2001, ubicados fuera de la región de cabeza y cuello.
Se reporta un caso inusual de EH (ALHE) que se ubica en la parte inferior de la espalda con una distribución zosteriforme.

Ver

Dres. V. Ramesh, M. Ramam, Pooja Pahwa, y Shalini Malhotra
Int J Dermatol. 2013 Jun;52(6):759-61.

Las manifestaciones incluyen la piel del pene y las limitadas a la mucosa, pueden involucrarse algunas veces ambos sitios.  A diferencia de la tuberculosis cutánea, que puede denominarse acorde a las características morfológicas, no se puede extender a PT, particularmente cuando el glande es el único sitio afectado.

Se observaron 15 pacientes de 892 casos de tuberculosis cutánea con lesiones limitadas en pene durante la década 2001-10.  Uno era un niño de 8 años, y los demás adultos entre 19 y 66 años.

Màs

Dres. Skroza N, Proietti I, Bernardini N, La Viola G, Nicolucci F, Tolino E, Zuber S, Potenza C.
Cutis. 2012;90:120-122.

La psoriasis es una enfermedad crónica de la piel con importancia relevante por sus comorbilidades y su alta prevalencia en la población general.  La tuberculosis (TB) es una enfermedad infecciosa causada por una bacteria del complejo Micobacteria tuberculosis.  Se reportan más de 3.8 millones de casos nuevos de TB según la Organización Mundial de la Salud cada año.  En el 90% de los casos reportados, la TB se presenta como infección latente; el otro 10% de los casos son formas activas.  La alta prevalencia de psoriasis y TB explica cómo pueden presentarse simultáneamente en el mismo paciente.

Ver

La tinea corporis en una infección por dermatofitos en la piel superficial.  Generalmente aparece como lesiones anulares eritematoescamosas con bordes elevados y centro respetado en tronco y miembros.  Se transmite de persona a persona o de un sitio a otro vía fomites.  La microscopía y cultivos son útiles para el diagnóstico, mientras que se pueden usar antifúngicos tópicos o sistémicos para el tratamiento.

Ver

Dres. Wang AS, Armstrong EJ, Armstrong AW
Am J Surg 2013; 206(3): 410-417

Los efectos de los corticoides sobre la cicatrización de las heridas ha sido un tema de gran interés entre los cirujanos, internistas y dermatólogos. En el siglo pasado, descubrimientos fundamentales en los mecanismos de cicatrización de las heridas, han aumentado el conocimiento de las interacciones moleculares entre los corticoides y las heridas cutáneas [1-11].

Esos descubrimientos científicos básicos, junto con los hallazgos de los estudios clínicos, han resaltado varias consideraciones importantes en relación con la administración perioperatoria de corticoides, en particular, dosificación, cronicidad y momento relativo a la cirugía.

Ver