La presencia de quistes en los senos es una afección muy común, especialmente entre mujeres mayores de 40 años. Muchos de los nódulos y quistes que pueden aparecer en las mamas son benignos, pero para diferenciar un nódulo benigno del cáncer de mama debes consultar a tu médico.
Si lo que tienes diagnosticado son nódulos y quistes no cancerosos, una dieta saludable y equilibrada puede ayudarte a evitar las molestias que los mismos suelen causar: sensación de dureza, dolores y calambres en los senos.
Evitar grasas saturadas y exceso de carbohidratos
La presencia de quistes fibrosos en las mamas ha sido asociada con el exceso en el consumo de carbohidratos, grasas saturadas y bajos aportes de fibra. Además, según algunos estudios, las mujeres que movilizan el intestino solo tres veces por semana, o menos, tienen mayores probabilidades de desarrollar quistes en los senos.
Por eso, lo ideal es aumentar la cantidad de frutas y verduras frescas de tu dieta, disminuyendo al mismo tiempo el pan, el arroz, las papas y las pastas, porque son ricas en carbohidratos, y los embutidos y carnes rojas, ya que son abundantes en grasas saturadas. Está demostrado que cuando la ingesta de grasas baja, también disminuye la producción de estrógenos y otras hormonas, responsables de la formación de quistes mamarios.
Además, el consumo de metilxantinas también puede predisponer para la formación de quistes en las mamas y ayuda a que éstos se inflamen. Los alimentos ricos en este tipo de sustancias son el té negro, el café, las bebidas cola y el chocolate. Si padeces quistes en los senos, en lo posible deberías reducir el consumo de estos alimentos al mínimo.
El rol de las vitaminas
Algunas pruebas también demuestran que la vitamina E y la vitamina A, que tienen un gran poder antioxidante, pueden ayudar a evitar la formación de quistes. Esta es otra razón para incluir en tu dieta abundantes frutas y verduras, ricas en vitaminas.
Las almendras, el aceite de oliva, las avellanas, las semillas de girasol y las semillas de sésamo (ajonjolí) son alimentos especialmente ricos en vitamina E. La zanahoria, la espinaca, el melón y los huevos son algunos buenos ejemplos de alimentos ricos en vitamina A. Si lo deseas, puedes complementar tu alimentación con un suplemento multivitamínico de venta libre.
Otros alimentos que pueden ayudar
Algunos estudios indican que el consumo de aceite de onagra (o prímula) y aceite de borraja podría disminuir la sensibilidad mamaria y las molestias que causan los quistes. Estos aceites son ricos en ácidos grasos omega 6, los cuales actuarían sobre el músculo liso de las mamas aliviando calambres y dolores.
El extracto de té verde es también un potente antioxidante. Se dice que consumir unos 200 ml al día de este extracto puede ayudar a evitar la formación de quistes en los senos.
Para finalizar, ten en cuenta que lo mejor siempre es prevenir, así que recuerda realizar el auto-examen mamario todos los meses (luego de la menstruación) para revisar si tus senos presentan alguna irregularidad. Es importante resaltar que, ante cualquier tipo de nódulo que encuentres en tus senos, te provoque molestias o no, debes consultar a tu médico, para obtener un diagnóstico correcto.
Fuente: Mejor con Salud
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