«Se sabía que el aceite a temperatura de fritura emite aldehídos que contaminan la atmósfera y que se pueden inhalar, así que decidimos investigar si estos compuestos todavía permanecen en el aceite después de calentarlo y, efectivamente, así es», señala a SINC María Dolores Guillén, profesora del Departamento de Farmacia y Tecnología de los Alimentos de la UPV.
La investigadora es coautora de un trabajo que confirma la presencia simultánea en el aceite de fritura de varios aldehídos tóxicos del grupo de los «oxigenados-insaturados», como el 4-hidroxi-(E)-2nonenal. La existencia de estas sustancias en el organismo había sido relacionada con diversos tipos de cáncer y enfermedades neurodegenerativas, como el alzhéimer y el párkinson. Ver mas….
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