Un incremento anual de la incidencia por tumores malignos se observa en Cuba en los últimos años, lo cual puede devenir un problema aún más serio en el futuro cercano, debido al acelerado proceso de envejecimiento de la población cubana y de los factores de riesgo presentes, entre ellos la obesidad, el tabaquismo y el consumo excesivo de alcohol, aseguró al periódico Granma la doctora Janet Lamadrid García, jefa del Departamento de Anatomía Patológica del Instituto de Oncología y Radiobiología (INOR).
Entre 2010 y 2019, el cambio relativo de las tasas de incidencia de cáncer en Cuba fue de un 22 % para uno y otro sexo, lo que representa un incremento promedio anual de 934 casos nuevos en el sexo masculino, y 764 para el sexo femenino, reconoció la avezada especialista, quien confirmó que esta continúa siendo la segunda causa de muerte en Cuba, después de las enfermedades cardiovasculares.
De acuerdo con el Registro Nacional de Cáncer (RNC), ente encargado de proporcionar al Ministerio de Salud Pública las cifras de episodio de esta enfermedad en el país, el cáncer de piel no melanoma tiene la mayor incidencia para uno y otro sexo.
A nivel mundial, el cáncer también va en aumento, entre otras razones por el envejecimiento poblacional y los estilos de vida poco saludables, expresó la especialista del INOR, quien reconoció que, en la actualidad, uno de cada cinco hombres y una de cada seis mujeres son diagnosticados con esta enfermedad; mientras uno de cada ocho hombres y una de cada diez mujeres morirán a causa de este padecimiento.
Igual comportamiento se observa en América Latina y el Caribe, donde se estima que haya un incremento de 1,5 millones de casos nuevos de cáncer al año, lo que representa el 7,6 % de todos los reportados a nivel mundial, estimándose que la carga de este padecimiento en la región aumentará un 67 %, alcanzando 2,4 millones de nuevos casos anuales para 2040.
La fecha coincide con el Día del Lunar en Cuba y se celebra con acciones de educación y prevención en los diferentes niveles de atención y con el apoyo de los medios de comunicación.
Los avances en el campo de la Oncología evidencian que muchos de los factores desencadenantes del cáncer pueden evitarse con estilos de vida saludables. El estrés sostenido, los malos hábitos, la inadecuada alimentación, sobre todo, el consumo de alimentos fumigados con químicos, incrementan el riesgo de mutaciones de las células y llevan a padecer esta enfermedad.
Las autoridades de salud recomiendan las dietas ricas en frutas, cereales, legumbres, vegetales y baja en grasa animal; evitar el consumo de alcohol y cigarro; respetar al no fumador y realizar actividad física. También sugieren relaciones sexuales protegidas, pues el virus del Papiloma humano tiene una gran influencia en la aparición del cáncer cervicouterino.
Importante además, la protección de los rayos de sol, con el uso de ropas adecuadas, sombrillas y sombreros, que previene el cáncer de piel. Justamente, el lema de este año es “Yo soy… y voy a…” que convida a reflexionar sobre la necesidad de cambiar estilos de vida inadecuados.
El cáncer no es sinónimo de muerte, pero sigue significando un problema de salud a nivel mundial. Existen procedimientos para controlarlo y prolongar la existencia, en algunos casos hasta la curación. Depende en gran medida de la fase en la que se diagnostique el tumor, pues como reza la sabiduría popular “a tiempo siempre se gana tiempo”. [Centro Provincial de Información Las Tunas].
En nuestro país se realizaron numerosas actividades de pesquiza y tratamiento de lesiones de la piel orgnizadas desde las instituciones de salud.
