Tomado de la compilación Viñetas de la historia de la Cirugía Pediátrica, de Don K. Nakayama, publicado en el Journal of Pediatric Surgery, Volumen 55, Páginas 1-37.
Operando una niña de 10 semanas de edad en 1955, Shigetsu Katsura, profesor de cirugía de la Universidad Tohoku en Sendai, Japón, buscó bajo el hilio hepático un remanente de las vías biliares, un quiste o protuberancia lo suficientemente grande para crear una anastomosis con un asa intestinal. Se trataba del último paso reglado antes de declarar la patología como la forma de atresia de vías biliares «incorregible», y por lo tanto incurable. Katsura no lo encontró. En una ocurrencia tardía de las que surgen en cirugía, decidió hacer una apertura en el duodeno y suturarlo al área que había incidido.
Para su sorpresa, durante la recuperación de la niña apareció bilis en las heces, y la ictericia comenzó a aclarar. Cuando otro lactante ictérico fue operado, Katsura decidió simplemente suturar el duodeno sin abrirlo a la superficie cortada de la placa fibrosa. La excreción de bilis apareció más lentamente, pero el niño tenía heces teñidas de bilis al alta. Sin embargo, la ictericia nunca aclaró, y el paciente falleció.
Un especialista joven que sería su sucesor como jefe de cirugía en Sendai, Morio Kasai (1922-2008, ver foto), realizó la autopsia. Se había formado una fístula desde los conductos biliares intrahepáticos hacia la luz del intestino. (…)
En estudios posteriores Kasai, Ohi (otro cirujano) y su patólogo Takahashi describieron la anatomía patológica de la atresia biliar: conductillos microscópicos de cientos de micras de diámetro, dentro de la placa fibrosa a nivel de la bifurcación de la vena porta. Cuando el próximo lactante fue operado, Kasai dio el osado paso de seccionar deliberadamente el tejido fibroso en el hilio donde Katsura había creado involuntariamente una fístula biliar. En lugar de suturar el tejido fibroso al duodeno, Kasai hizo la anastomosis a un asa ciega de yeyuno con una yeyunoyeyunostomía en Y de Roux.
El lactante fue su primer superviviente a largo plazo, uno de sus éxitos reportados 13 años más tarde en 1968 en su primera publicación en inglés, en el Journal of Pediatric Surgery. (…) En una labor que les llevó décadas, Kasai y Ohi hicieron modificaciones a la técnica y los cuidados postquirúrgicos que mejoraron sostenidamente sus resultados: el beneficio de una operación temprana; la disección para preservar áreas críticas donde los conductillos son consistentemente más numerosos; y la antibioticoterapia agresiva ante los episodios de colangitis, que comprometía especialmente el flujo biliar. La supervivencia libre de ictericia alcanzó el 55% entre los operados en la década de 1980, una mejoría ostensible para una entidad que era uniformemente fatal en la infancia, un progreso que comenzó cuando Kasai dio el paso inspirado más allá de la idea quirúrgica de su jefe, para así corregir lo «incorregible».
Comentarios en Operación de Kasai: la inspirada idea que llevó a corregir lo incorregible
DR. PEDRO VILORIO BARRERA @ 4:25 pm
Alejandro te felicito por poner en la página web la historia de la Cirugía Pediátrica de esa gran nación científica que son los EEUU ,que quizás algun día podramos intercambiar como hicimos muchos años ,con destacadísimas figuras ,que incluso nos visitaron y nosotros también los visitamos ,cuando vuelvan a abrirse las grandes alamedas y desaparezcan de ese país la escoria que actualmente los representan volvermos a vernos e intercambiar nuevamente.Esta historia debe ser estudiada por todos nuestros jóvenes cirujanos pediatras para poder entender como ha sido el trayecto brillante de nuestra especialidad . Te felicito Alejandro.