Big Data: Volúmenes de información extremadamente grandes que pueden analizarse por computadoras para revelar patrones, tendencias y asociaciones.
En una publicación previa de este sitio web titulada La cirugía asistida por Inteligencia Artificial, lo más novedoso entre las perspectivas de la cirugía endoscópica pediátrica, ya nos habíamos referido a la repercusión que tiene y tendrá el acelerado desarrollo tecnológico digital en la práctica quirúrgica pediátrica.
Por su parte, los autores James Wall y Thomas Krummel han publicado el trabajo The digital surgeon: How big data, automation, and artificial intelligence will change surgical practice, en el Journal of Pediatric Surgery, Volumen 55. A continuación ofrecemos una traducción del resumen, y los invitamos a leer el texto completo en el enlace.
El crecimiento exponencial de la capacidad de las computadoras, del almacenamiento de datos, y de la tecnología sensitiva, ha conducido a un mundo en el cual podemos obtener y además analizar increíbles volúmenes de información. La evolución en el aprendizaje de las computadoras ha impulsado su capacidad para proporcionar conclusiones a partir de volúmenes masivos de datos que están más allá de la capacidad humana de análisis. La convergencia de capacidad computacional, almacenamiento de información, conectividad e Inteligencia Artificial, ha conducido a tecnologías que, hasta la fecha, se han concentrado en áreas diagnósticas como la radiología y patología.
La cuestión sigue siendo cómo la revolución digital se traducirá en el reino de la cirugía. Existen tres áreas donde los autores creen que la inteligencia artificial pudiera impactar la cirugía en el futuro cercano: optimización de las modalidades de entrenamiento, optimización cognitiva del cirujano, y automatización de procederes.
Mientras que la promesa que brindan el Big Data, la Inteligencia Artificial y la automatización es grande, ha habido contratiempos inesperados en el uso de estas tecnologías que vale la pena considerar al evaluar cómo podrían o deberían adopterse en la práctica quirúrgica.
Los cirujanos deben estar preparados para adoptar modalidades de entrenamiento más inteligentes, supervisar el aprendizaje de las máquinas que pueda optimizar la función cognitiva y, en última instancia, supervisar la cirugía autónoma sin permitir que decaigan las habilidades quirúrgicas.
Deje su comentario