Aún cuando en la última década la cifra disminuyó, cerca de 805 millones de personas en mundo padecen hambre, es decir, una de cada nueve, según un informe especializado publicado recientemente.
De acuerdo con el texto «El estado de la inseguridad alimentaria en el mundo (SOFI 2014)», en los últimos 10 años el número de personas que sufren hambre a nivel mundial bajó en más de 100 millones, y desde 1990-1992, en más de 200 millones.
El informe es publicado anualmente por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA).
Sus autores aseguran que la tendencia general en la reducción del hambre en los países en desarrollo significa que el Objetivo de Desarrollo del Milenio (ODM) de disminuir a la mitad la proporción de personas subalimentadas para 2015 puede alcanzarse «si se intensifican los esfuerzos apropiados de forma inmediata».
Hasta ahora 63 países en desarrollo alcanzaron la meta de los ODM y seis más están en camino de conseguirla en 2015.
«Esta es la prueba de que podemos ganar la guerra contra el hambre, y debería inspirar a los países a seguir adelante, con la ayuda de la comunidad internacional en lo que sea necesario», subraya el documento.
Enfatiza que una reducción del hambre acelerada, sustancial y sostenible es posible con el necesario compromiso político, el cual tiene que contar con información suficiente y una buena comprensión de los problemas nacionales, las opciones de política pertinentes, amplia participación y lecciones de otras experiencias.
SOFI 2014 alerta que, a pesar del progreso significativo en general, varias regiones y subregiones se han quedado rezagadas, como sucede en África subsahariana, donde más de una de cada cuatro personas permanecen crónicamente subalimentadas.
En tanto, en Asia, la región más poblada del mundo, vive la mayoría de los hambrientos: 526 millones de personas.
En contraste, destaca, América Latina y el Caribe han logrado los mayores avances globales en el aumento de la seguridad alimentaria.
Mientras, Oceanía registra solo una modesta mejora (una disminución del 1,7 %) en la prevalencia de la subalimentación, que se situó en el 14 % en 2012-2014.
Con una cifra de personas todavía desnutridas «inaceptablemente alta» , los responsables de la FAO, el FIDA y el PMA destacaron la necesidad de renovar el compromiso político para combatir el hambre y de transformarlo en acciones concretas.
septiembre 18/2014 (PL)
Tomado del Boletín de Prensa Latina Copyright 2014 «Agencia Informativa Latinoamericana Prensa Latina S.A.