Investigadores han estado trabajando por años para determinar si problemas genéticos están aumentando las tasas de cáncer mamario terminal en mujeres negras en Estados Unidos.
Ahora, el estudio genético más extenso hasta la fecha halló que una cada en cinco mujeres negras ya diagnosticadas con cáncer de mama y remitidas a estudios genéticos tenía al menos una de las 18 mutaciones genéticas que aumentan el riesgo de padecer la enfermedad.
El hallazgo, presentado el lunes en la reunión de la Sociedad Estadounidense de Oncología Clínica (ASCO) en Chicago, sugiere que mutaciones heredadas podrían ser más comunes de lo esperado en mujeres negras con cáncer de mama, señalando la necesidad de estudios genéticos más amplios y controles entre estas mujeres y sus familias.
Aunque las mujeres blancas en Estados Unidos son un poco más propensas a desarrollar cáncer de mama que las negras, en mujeres menores de 45 años el cáncer de mama es más común entre las afrodescendientes. Y es más mortal.
Según los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC), las mujeres negras en Estados Unidos tienen las mayores tasas de defunción por cáncer de mama de todos los grupos raciales y étnicos y son un 40 % más propensas a morir por cáncer de mama que las blancas.
«Durante muchos años hemos visto que el cáncer de mama causa un elevado número de víctimas entre las mujeres afroamericanas y este estudio comienza a resolver preguntas pendientes sobre qué está produciendo estas disparidades», dijo la doctora Jane Chuperk de la Universidad de Chicago.
Chuperk y sus colegas usaron un nuevo test de genoma disponible para investigadores académicos y llamado BROCA, el cual permitió al equipo examinar al mismo tiempo 18 genes susceptibles al cáncer de mama.
Sometieron a pruebas a 249 mujeres con cáncer de mama que fueron referidas a exámenes genéticos en la Universidad de Chicago.
En total, un 22 % de aquellas mujeres presentaba al menos una mutación que elevaba sus riesgos de desarrollar cáncer de mama. Las alteraciones en los genes conocidos de cáncer de mama BRCA1 y BRCA2 representaron alrededor de 79 % de las mutaciones.
Las mujeres con mutaciones de estos genes tienen de un 37 a un 85 % de riesgo durante su vida de desarrollar cáncer de mama, en comparación con el 12 % de probabilidad entre las mujeres en la población general.
Alrededor del 21 % de las mujeres presentaba mutaciones de otros genes susceptibles al cáncer de mama, incluyendo el CHEK2, PALB2, ATM y PTEN. Las mutaciones en el rango de estos genes diferían entre las mujeres, lo que sugirió la necesidad de realizar más pruebas.
«Casi todas las mutaciones eran diferentes. Esto es importante. Para algunas poblaciones podemos usar exámenes que solo busquen unos puntos importantes de algunos genes. Esa técnica no funcionará en esta población con una diversidad genética tan grande», aseveró.
La doctora Sylvia Adams, especialista de la Universidad de Nueva York, dijo que los resultados de la investigación no deberían interpretarse como una prueba de que todas las mujeres negras deberían someterse a exámenes genéticos en busca de riesgo de cáncer de mama.
En lugar de esto, debería recordarles a los médicos que refieran a las mujeres negras jóvenes con cáncer de mama a estudios genéticos con la esperanza de detectar o prevenir la enfermedad entre miembros de sus familias.
junio 5/2013 (Reuters)
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