Editorial

“Por tantas razones”. Por el Profesor Dr. Rider Palermo Lobaina,

La primada de Cuba sufrió la crueldad de un evento meteorológico de enormes proporciones, su noble población recibió el embate de vientos huracanados que con saña destruyeron sus coloniales viviendas, sus históricos patrimonios, sus instituciones administrativas y de servicios, sus bellos ríos se convirtieron en azote de sus opulentas riveras, sus majestuosas playas enfurecieron y junto a su bravío mar, arremetieron contra su pintoresco paseo del malecón, sus aguas invadieron las calles y se convirtieron en fluidos tentáculos para penetrar en las viviendas de sus moradores y arrastrar los humedecidos útiles que confortaban la vida de sus habitantes. Es triste el panorama. Baracoa la primada, con sus mas de 500 años atesorando su valor cultural, conservando sus atractivos turísticos y espirituales ha sido fuertemente agredida por un fenómeno que por mas de 5 horas sentó base para moler su arquitectura, lo logró, pero, tantas razones existen para mirar al frente y decir “te levantarás”, fuiste la elegida para aparecer entre chinampas verdes y floridas mecidas entre las espumosas aguas del mar  caribe ante los atónicos y confundidos conquistadores para sufrir la crueldad de la metrópolis contra la población autóctona, atesoras la rebeldía del indio Hatuey, conserva la Cruz de Parra como símbolo de la religiosidad impuesta, también tus fuertes, fortines, torreones y hasta un Castillo para protegerte de piratas y filibusteros avariciosos y pillos que quisieron hacerte su asentamiento, una bella durmiente que junto a un imponente yunque hacen del horizonte un grato entorno,  que de tus tierras bananeras, cacaotera, cafetalera y cocotera brindaron sostén laborioso a tus hijos, que fuiste de las primeras en acoger en su seno el utilitario empleo del transporte ferroviario, abandonada por regimenes neocoloniales que solo te utilizaban los oligarcas del momento para recoger jugosas sumas al apoderarse de los presupuestos aprobados para los programas viales que nunca fueron cumplidos;   pero llegó el día que te libraste de tan largo insomnio  y abandono, un nuevo amanecer, el día que pudiste decirnos a tus hijos, adelante, prepárense, el futuro es de ustedes, muchos, te escuchamos, las primeras becas, los primeros médicos, los primeros ingenieros, los primeros deportistas, los primeros todos, tuviste tu vial ansiado por años, una de las maravillas de la arquitectura cubana, que transcurre por una farola con impresionantes pasajes naturales, parecidos de sueños, tus hijos agradecidos, diseminados por toda Cuba y el Mundo, que te añoran y sufren este desastre, que por ser natural, no nos crea odio ni rencor, sino mas que fuerza,  para ayudar  a levantarte, no estamos solos, la cultura de la solidaridad de que somos fruto los cubanos de esta época, reflejada en el internacionalismos de los próceres de nuestras guerras de independencias, desde Máximo Gómez,  hasta Ernesto Guevara, y otros y otros, que nos enseñaron a hacerlo con los humildes de otros latitudes, compartir lo que modestamente tenemos, se convierte en razón para compartir contigo este momento y contribuir a tu levante.

La dirección del país te asiste, hay experiencia acumulada, hay organización, voluntad política, administrativa y humana para hacerlo.

Hoy vemos como Santiago de Cuba, tierra de héroes, hospitalaria y solidaria, que conoció la destrucción de su ciudad en épocas recientes, y que supo levantarse y convertirse en “mas bella y preparada”, producto del trabajo de una administración humana, abnegada y dedicada, sumada al esfuerzo de todo el pueblo y la solidaridad de toda Cuba y de muchas partes del mundo, se alista a brindarte su experiencia, su solidaria contribución a la ejecución de las labores de restablecimiento y recuperación del bienestar físico y emocional de esa noble población, seguro todo el país lo hará igual. Mucha fe, “te levantarás”

Porque dentro de tu territorio siendo un niño pude contribuir a la alfabetización de otros a los que se le había negado el derecho de aprender, porque vi morir infantes de parasitismo, porque conocí del hambre, la miseria, los vicios y la explotación, porque en una   de tus instituciones médicas tuve mi primera experiencia como estudiante de medicina, porque la institución hospitalaria municipal atesora el nombre de unos de los patriotas que más me impactó en mi formación como médico.

Desde mi posición como Urólogo, hijo humilde de esa tierra, que te debo gracias por la oportunidad que me diste de formarme bajo  los principios humanistas que caracterizan a tus hijos, reforzado por las enseñanzas y práctica de los valores del proceso de formación que desarrollamos en nuestra patria, cultivado en las Fuerzas Armadas Revolucionarias donde presté servicios por mas de 40 años y que desde la posición de docente que desempeño actualmente, transmito a mis educandos, te brindo mis servicios solidarios. Como yo, muchos.

“Te levantarás”.

Dr. Rider Palermo Lobaina, Santiago de Cuba. Octubre 2016.