Peces
El pez Cebra (Brachydanio rerio), constituye un eslabón importante en la cadena trófica. Su alta sensibilidad ante determinadas sustancia tóxicas conlleva a la disminución de sus poblaciones con el consiguiente impacto negativo que esto provoca sobre el ambiente en el que habita. Es un organismo ovíparo que nos aporta embriones transparentes, permitiéndonos definir concentraciones letales y hasta cierto grado los efectos subletales, en estadios tempranos del desarrollo embrionario, que las sustancias químicas y biológicas pueden causar sobre el ecosistema, es una de las especies más utilizadas como herramienta potencial en las investigaciones médicas, biotecnológicas y ecotoxicológicas. Esta especie constituye un excelente modelo de ensayo, descrito y aceptado por las guías de la EPA y la OECD para realizar los estudios de toxicidad.
El pez Guppy (Poecilia reticulata), especie originaria de las Islas Trinidad, Martinica y Sao Tome, prefiere habitar las aguas claras, neutras o ligeramente alcalinas y duras. Soporta amplio rango de temperatura (18-33 ºC). Se reproduce todo el año, en los meses de verano cada 30 días y en invierno cada 45. Es un pez omnívoro, acepta cualquier tipo de alimentación en cautiverio. Por su sensibilidad a los tóxicos, fácil reproducción, capacidad de adaptación a las condiciones de laboratorio y a las manipulaciones a que es sometido constituye un excelente modelo de ensayo, descrito y aceptado por las guías de la EPA y la OECD como una de las especies para realizar los estudios de toxicidad en peces.
Anuros
Los anfibios son potencialmente valiosos como especies centinelas debido a la naturaleza de sus diferentes fases de vida, acuática y terrestre. Varios estudios han examinado la fase de vida de renacuajo como un indicador sensible de exposición y efectos a herbicidas. Las larvas de rana platanera Osteopilus septentrionalis, es una especie originaria de Cuba y única representante en nuestro ecosistema perteneciente a la familia de las Hylidae, habita entre los arbustos y se caracteriza por realizar el desove en espejos de agua estancada. Su alta sensibilidad ante diversos xenobióticos; agentes químicos, biológicos y las modificaciones detrimentales de los hábitats naturales, hacen de la rana, un importante bioindicador.
Es una especie que se adapta a las condiciones de laboratorio así como a la manipulación a que va a ser sometida y permite obtener un gran número de ejemplares en cada desove del animal. Tiene gran representatividad desde el punto de vista ecológico, se encuentra en todo el país tanto en los ecosistemas acuáticos como terrestre trepadas en pequeños y grandes árboles, cohabitando con el hombre en zonas urbanas (casas, parques jardines, etc.), rurales (llanos, montañas) y costeras. Su papel dentro de la cadena trófica es muy importante, pues es un controlador biológico de plagas transmisoras de enfermedades al hombre y otras que ocasionan daños a cultivos.