Después de haber revolucionado el tratamiento de los tumores sólidos, la inmunoterapia (o la modulación del sistema inmunológico para enseñar al organismo a defenderse contra determinadas agresiones) se abre paso con fuerza en el tratamiento de los tumores hematológicos.
Así se ha puesto de manifiesto en el congreso anual de la Sociedad Americana de Hematología (ASH), que se celebra estos días en San Francisco con la asistencia de más de 26.000 expertos de todo el mundo en este campo.
Así lo reconoce uno de los principales médicos mundiales de la especialidad, el español Jesús San Miguel, elegido por la ASH para impartir la Ham-Wasserman Lecture, una de las sesiones estrella del congreso que imparte un investigador extranjero y que en esta ocasión versó sobre el tratamiento del mieloma múltiple, el segundo cáncer hematológico más frecuente y que, aunque todavía considerado incurable, ha multiplicado por tres su supervivencia en la última década.
Sin embargo, no ha sido en esta enfermedad en la que se ha probado con éxito la inmunoterapia ya ensayada en melanoma y otros tumores sólidos, sino en el linfoma de Hodgkin que, según se ha visto, se caracteriza por una alteración genética que modifica la vía inmunológica PD1 (que corresponde a las siglas de Muerte Programada 1), un receptor situado en la superficie de las células del sistema inmune que impide que estas respondan adecuadamente ante el ataque que supone el crecimiento descontrolado del cáncer. «No las reconoce porque las células cancerosas son muy similares a las normales», explicó en rueda de prensa la investigadora de la George Washington University Catherine Bollard.
En cierta manera, PD1 es una vía con truco para el propio organismo: existe para protegerlo de las respuestas exageradas del propio sistema inmune y el cáncer se aprovecha de esto para crecer a sus anchas. Por esta razón, PD1 y otras vías similares se denominan en inglés checkpoints (controles fronterizos) y las estrategias para luchar contra ellas inhibidores de dichos controles.
En la reunión de San Francisco, se han presentado los resultados de dos estrategias distintas para inhibir este mecanismo de defensa que, paradójicamente, puede fomentar el cáncer. Se trata de dos estudios con pocos pacientes que, sin embargo, han dado resultados muy prometedores. El primero de ellos ha evaluado el fármaco nivolumab en 23 pacientes con linfoma de Hodgkin refractario o con recaídas y los resultados se han publicado simultáneamente a su presentación en la revista New England Journal of Medicine. El trabajo ha demostrado una eficacia destacable (el 17% obtuvo respuesta completa y el 70% parcial) en pacientes que habían recibido hasta tres tratamientos previos sin éxito.
El segundo evaluó un inhibidor de PD1 ya aprobado para el tratamiento del melanoma, el penbrolizumab, en 29 pacientes que tampoco acabaron con el cáncer con los tratamientos clásicos. De nuevo, los resultados fueron positivos en pacientes para los que, como destaca el investigador del Memorial Sloan Kettering Cancer Center y principal autor del estudio, Craig Moskowitz, esta era «su última oportunidad».
El linfoma de Hodgkin no ha sido el único cáncer hematológico que parece que puede beneficiarse de la inmunoterapia. Otro trabajo ha evaluado su eficacia en la leucemia linfocítica aguda que mantienen enfermedad residual, una característica que aumenta su riesgo de recaídas. El blinatumomab mostró acabar con dichos residuos en el 78% de los pacientes, con apenas efectos secundarios.
La terapia génica combinada con la inmunoterapia también ha tenido su protagonismo en el congreso, en esta ocasión en la leucemia agresiva pediátrica. Los investigadores dirigidos por Stephan Grupp, del Children’s Hospital de Filadelfia, modificaron genéticamente parte de las células T del sistema inmune de 39 niños en un complejo procedimiento: extrajeron las células de su sangre y las dotaron de un antígeno que se dirige a la proteína CD19 presente en muchas de las células de la leucemia. Tras volver a ser insertadas en la sangre de los pacientes, el 92% consiguió una respuesta completa frente a la enfermedad.
Estos cuatro estudios, y más trabajos presentados en el congreso, demuestran que la inmunoterapia ha llegado a los cánceres hematológicos para quedarse y que seguirá protagonizando muchos congresos similares en un futuro, aunque queda lejos que sustituya a la quimioterapia o al transplante autólogo, muy eficaz todavía en la mayoría de los casos.
Avances en mieloma múltiple
Cuando se le pregunta a San Miguel que es lo más destacable de lo presentado frente al mieloma múltiple, el prestigioso hematólogo de la Clínica Universitaria de Navarra no duda en contestar: «La novedad es que no hay una única novedad». Y es que son muchos los avances que se han escuchado sobre este cáncer, que ha pasado de tener un pronóstico infausto a, según San Miguel, desconocerse su actual mediana de supervivencia. «Salen fármacos nuevos cada año; si en los 90 se hablaba de 3-4 años ahora podríamos asegurar los 8-10, pero nadie lo sabe con certeza», explica.
Aunque San Miguel insiste en que la quimioterapia es un tratamiento «muy bueno e injustamente denostado», el especialista destaca la aparición por primera vez de anticuerpos monoclonales frente a la enfermedad, así como de inhibidores de los proteosomas y hallazgos respecto a la biología de este tipo de cáncer.
Las llamadas sustancias inmunomoduladoras (IMIDS) suponen otra de las novedosas vías de acción frente al mieloma. Por primera vez, se ha demostrado la eficacia de una de ellas, la lenalidomida en combinación con un un corticoide a bajas dosis, para el control a largo plazo de la enfermedad, mientras otro fármaco similar, la pomalidomida, ha sido ensayado con éxitos en distintas combinaciones. «Lo importante es disponer de muchas opciones», concluye San Miguel que, entusiasmado, comenta: «Nada mas acabar mi conferencia, se me han acercado dos laboratorios para que pruebe nuevos medicamentos contra el mieloma».
Tomado de: http://www.elmundo.es/salud/2014/12/07/5481e511268e3efb708b4595.html
La inmunoterapia se abre paso en los cánceres de la sangre. AINHOA IRIBERRI San Francisco
Actualizado: 08/12/2014 05:31 horas