Ante la amenaza epidemiológica que representa la viruela del mono –ya declarada por la OMS como una emergencia de salud global– el sistema nacional de Salud en Cuba estableció un grupo de acciones dirigidas a prevenir y enfrentar el riesgo de propagación de esta zoonosis, que aún no notifica contagios en la Mayor de las Antillas.
Al respecto, la doctora Carilda Peña, viceministra de Salud Pública, en su intervención en la reunión de la Comisión Permanente de Salud y Deporte de la Asamblea Nacional, que sesionó recientemente en su Noveno Periodo Ordinario de Sesiones, al actualizar sobre la situación epidemiológica, repasó las principales acciones que implementa el país ante la enfermedad.
En primer lugar, se reforzó la vigilancia epidemiológica en los puntos de entrada al país, y se capacitó al personal de Salud para la detección oportuna de casos sospechosos.
Asimismo, se definió el flujograma de atención al enfermo con sospecha de la enfermedad, se establecieron las medidas de control de foco, y se definieron las unidades asistenciales para la atención de casos con la enfermedad.
Igualmente, se establecieron las normas de bioseguridad para pacientes, familiares y prestadores de servicios, teniendo en cuenta el nivel de contagiosidad y la forma en que se propaga esta patología.